martes, 20 de abril de 2010

Alianza de civilizaciones

Tema difícil el que he escogido hoy para escribir. No es que no dé para un artículo bueno, al contrario, daría para muchísimas entradas, pero creo que no voy a tener más remedio que entrar en diferencias entre personas; cosas que es posible que para unos sea lo más normal del mundo y para otros pueda ser incluso delito. Es ahí cuando la “alianza” se rompe. Y es ahí donde está la dificultad.

Comenzó Anson ayer escribiendo que “si una mujer sudanesa osa vestir pantalones vaqueros se la castiga con 40 latigazos que le levantan la piel de la espalda y el rabel”.
Cuando uno lee esto, no puede negarse a pensar que es una barbaridad, una brutalidad que no se debería de consentir, y parece lógico pensar también que si una mujer española va a Sudán tendrá que atenerse a las leyes de ese país y no ponerse vaqueros.

Ahora viene la pregunta más normal para con el tema de esta entrada: ¿Cómo podemos tener una “alianza de civilizaciones” con países en los que se practica de una forma totalmente normal, incluso lo propone su religión, el maltrato a la mujer, cuando en España llevamos luchando tantos años por la igualdad de sexos, por las mismas oportunidades y condenamos tan enérgicamente la violencia de género?

El otro día leí una noticia de una niña que se negaba a quitarse el velo para asistir a un colegio de Madrid. En ese colegio resulta que está prohibido asistir con la cabeza tapada, y contaban otras alumnas que a ellas no se les ocurre ponerse un gorro ni un sombrero, como es normal, porque en el centro no se puede. Los niños tampoco pueden ir con gorra. La familia de la estudiante del velo, decía que lo llevaba puesto por religión y que no podían creer que en un país civilizado como éste pasaran estas cosas.

Pues bien, si una mujer española va a Sudán, como he dicho antes, seguramente no se podrá poner vaqueros, porque las leyes de ese país son así, y si alguien de otro país viene a España se tendrá que atener a nuestras leyes. Si éstas son muy estrictas, en el caso de ese colegio con los pañuelos, es un tema que, aún así, tendrán que respetar.
El quitarse un pañuelo de la cabeza o un velo para asistir a un colegio no lo veo yo tan estricto, vamos, que no son 40 latigazos, pero si alguien lo ve excesivo pues tendrá que atenerse a nuestras reglas.

Es aquí donde fallamos. Lo de la “alianza de civilizaciones” parece ser un juego inventado para que nosotros tengamos que respetar a todo el mundo y a nosotros no nos respeten. Incluso este juego, en algunas ocasiones, nos hace que nos propongamos rectificar nuestras propias reglas para que otros países puedan imponernos las suyas.

Nuestra civilización no se puede aliar con unas costumbres y unas formas de pensar que son contrarias a lo que creemos, ni con unas reglas y leyes a las que condenamos por simple ética moral.

¿Cómo se puede crear una alianza para, supuestamente, combatir el terrorismo, con algunos países que tienen creencias contra las que llevamos luchando tantos y tantos años?
¿Cómo podemos acabar con el terrorismo si nos aliamos con civilizaciones que practican con total libertad lo que nosotros consideramos terror?

Yo pienso que en España prohibimos prácticas que juzgamos como atroces o abominables y cuando salimos fuera nos ponemos el mismo velo en los ojos que hemos condenado dentro, o el mismo burka.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Querido Corpus tienes toda la razón, he tenido la suerte de haber visitado Estambúl, una ciudad de ensueño y según dicen de lo más avanzado de Turquia puesto que se podían visitar las mezquitas, pero ¡ojo¡ todos descalzos y las mujeres con un pañuelo que les tapara todo el cabello.¿ como ellos no comprenden que las leyes en nuestro pais las tienen que cumplir ellos, lo mismo que nosotros cumplimos las suyas en su tierra?. Allí nadie discute eso, ó al menos yo no vi a nadie que lo hiciera, pero aquí es todo lo contrario, de momento salen partidarios de que no lo cumplan de entre nosotros.Si esa es la Alianza de civilizaciones que queremos, vamos a tener que acatar sus leyes porque ellos no acatarán las nuestras y sería una pena, sobre todo para la mujer que tanta igualdad ha conseguido entre nuestra civilización.

corpus nudum dijo...

Hola amigo.

No he tenido la suerte de estar en Estambul, pero seguro que tiene que ser preciosa.

Es a ese tema al que voy. Yo creo que para crear una alianza, tiene que haber primero un respeto mutuo a las costumbres. Pero no es solo eso, porque algunas civilizaciones tienen costumbres o reglas o leyes que nosotros no podemos respetar, digo más, que nosotros tenemos que condenar.

Podemos hacer lo que se esta haciendo hoy en día: pasar por alto prácticas comunes de algunos países como por ejemplo el maltrato a la mujer y de esa forma sí que tendremos una “alianza de civilizaciones”. Pero haciendo esto… al mismo tiempo machacamos nuestras propias ideas y creencias de lo que es una civilización.

Pero es lo que tú dices. Nosotros cuando viajamos a otros países tenemos que cumplir las reglas que allí se imponen, como es lógico, aunque estemos totalmente en contra de ellas, pero cuando gente de otras costumbres viene a España somos también nosotros los que nos tenemos que adaptar.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Parece mentira la tremenda discriminación que sufre allí la mujer, hasta a la hora de enterrarla está discriminada puesto que la entierran en los sitios peores, por ser mujer. Se nota en todo, incluso en los sitios que tienen que ocupar en las mezquitas, que están obligadas a ponerse detrás y arriba, donde los hombres no puedan verlas. Si esa es la civilización con la que nos queremos aliar, hay que conseguir antes que respeten a la mujer, porque sino debemos decir aquello de "más vale estar solo que mal acompañado".