martes, 17 de febrero de 2009

El holodomor

Hace algún tiempo, escribí en este blog un artículo en el que hago referencia a algunas mentiras o bulos que se dicen fruto de la historia mal contada. Le dí el nombre de “Las chorradas que se dicen”. Terminé el escrito de una forma poco usual en mí, porque no es normal que yo escriba algo que no argumente con datos. Es muy posible que haya gente que no esté de acuerdo con algunas posturas mías, cosa que es muy respetable, pero nunca se podrá decir que lo que yo escribo no esta argumentado.
Como digo, terminé la entrada hablando del genocidio ruso y diciendo que “quizá esto se merezca un artículo aparte algún día”.
Tengo que rectificar estas palabras. Después de buscar en la historia información sobre este tema y datos que pudieran pasar desapercibidos por culpa de mi ignorancia, tengo que decir que quizá esto se merezca más de un artículo.
El horror que he tenido que leer para poder escribir este texto, aunque no quede totalmente plasmado en él por no querer herir la sensibilidad de algunos lectores que yo se que les podría afectar, ha sido terrible.
Dicho esto voy a empezar por el Genocidio Ucraniano: el Holodomor.

Se le llamó así al hambre provocada por el régimen comunista de la URSS en la República Socialista Soviética de Ucrania bajo el gobierno de Stalin.
Como he dicho antes, esto quizá se pueda merecer más de un artículo porque este régimen provocó más hambrunas aunque el término Holodomor solo se refiera a Ucrania.

Holodomor significa “matar por hambre”. Durante los años 1932 y 1933 murieron así millones de personas.

Ucrania era conocida como el “granero de Europa”, era una de las principales productoras de trigo del mundo, cuando sufrió una de las tragedias más espantosas del siglo XX: La hambruna provocada por el régimen de Stalin.

Seis millones perecen en la hambruna sovietica

Stalin vio al nacionalismo Ucraniano como una amenaza y a causa de eso asesinó y deportó a campos de trabajo de Siberia a millares de escritores, líderes religiosos e intelectuales.

Después fue decisión del partido comunista de la Unión Soviética la colectivización de las tierras de los campesinos que fueron confiscadas por el estado y cuyas pautas de producción eran fijadas por las autoridades subiéndolas cada vez más para provocar la muerte de la población por inanición.

Ya en 1931 comenzaron los primeros problemas por la falta de comida en varias regiones y murieron miles de personas. La situación era perfectamente conocida por las autoridades.

En 1932 Iósif Stalin decretó un aumento en las cuotas de producción, y estableció 10 años de prisión o pena de muerte por la utilización de pan como forma de pago por el trabajo.
La gente se comía las hojas de los árboles, la hierba, los perros, los gatos, y seguían muriendo de hambre.

Las autoridades soviéticas decidieron generar una hambruna “artificial” para acabar con toda resistencia contra el régimen y controlar totalmente a los campesinos.

En 1933, existía suficiente comida en Ucrania para alimentar a toda su población durante dos años y la gente se moría. Europa occidental y EEUU enviaban cargamentos de comida que eran confiscados por las autoridades soviéticas, y la gente se seguía muriendo.
La cosecha de trigo de ese año se vendió a un precio por debajo del mercado para agotarla y asesinar a la gente de hambre. Esta cosecha hubiera sido suficiente para alimentarlos.

Hambre, desesperación, muerte en la agonía de Ucrania

El número de víctimas no está muy claro debido a las restricciones en el acceso a los archivos de la URSS, al secretismo impuesto por el régimen, a los entierros en fosas comunes, etc.
Estimaciones aproximadas dicen que en Ucrania hubo de tres y medio a cuatro millones de muertos, otros dicen que siete millones en toda la Unión Soviética, y otros dicen que de siete a quince millones solo en este “granero de Europa”.
La aproximaciones no coinciden ni en los millones, parece mentira que se pierdan las cuentas de las personas tan fácilmente.

Me parece que ya está bien por hoy. No sigo más.

viernes, 6 de febrero de 2009

No os preocupéis y a vivir la vida

Es curioso que haya gente que se atreva a tomar por tontos a las demás personas, sin importarle que estas últimas tengan otros pensamientos, que puedan ser incluso listos, o que simplemente puedan tener sus propios ideales o formas de asimilar su existencia.

La ciencia se desvive por explicar de alguna forma el porque de nuestra existencia: como empezó todo, el sentido de la vida.
Escritores, pensadores, filósofos de todo el mundo se quiebran la cabeza inventando frases y fórmulas para explicar lo que por ahora es inexplicable.
Teólogos y estudiosos de muchas religiones, no encuentran otra solución al problema, al enigma de la vida, solo la presencia de un ser superior.
Miles de astrónomos miran a las estrellas intentando dar respuesta al por qué de la existencia del universo, de la existencia de nosotros.

Millones de personas piensan que al final la ciencia dará con la clave del principio humano, otros muchos millones piensan que hay un ente, un Dios que fue el que lo empezó todo. Por ahora nadie ha sido capaz de desvelar si llevan razón unos u otros, nadie ha podido decir que estamos aquí por esto o por lo otro.

Es cierto que la ciencia le ha comido un gran terreno a la religión pero le queda muchísimo por andar, por desmentir o por demostrar y mucha gente de a pie y hablo de la mayoría de la humanidad se conforma con creer en un Dios, al menos mientras que la ciencia anda su largo camino, ese que no sabemos si tiene fin o no.

Yo no tengo una creencia arraigada ni fija para defender, no tengo una religión en la que crea con toda mi alma y sin que haya posibilidad de dudas, pero sí pienso que algunas religiones como la cristiana, hacen a la gente mejores personas. Creo que mucha gente necesita creer en esta religión para conocer de donde venimos, para explicarse su existencia, o para sentirse tranquilos de que alguien, un Dios, está constantemente velando por ellos y por los suyos y más aun a falta de otra justificación más convincente.

Pues queridos amigos, ya no tenemos de que preocuparnos, ya está todo arreglado. Han llegado unos pocos de listos o mejor dicho unos pocos que son más listos que el resto de la humanidad y han dado respuesta al misterio. Sí, tal y como lo estáis leyendo.
¡Por los cojones!


Se hacen llamar Unión de ateos y librepensadores, y han organizado una campaña para hacer publicidad en los autobuses de algunas ciudades. En la campaña dicen: “Probablemente Dios no existe. Deja de preocuparte y vive la vida”.
¡Ala! ¡Alegría “pa toel” mundo!

Visto lo visto ya está todo solucionado. Menos mal que han llegado estos, porque yo tenía un roe que roe en la cabeza que no me dejaba en paz: ¿Existirá un Dios? ¿No existirá?
Pero ya están aquí mis salvadores y me dicen que no me preocupe y que viva la vida. Pues siendo así… problema resuelto.

Habrá que pedir responsabilidades a nuestros políticos por no haber pensado esto antes. Si lo hubieran hecho, se habrían solucionado rápidamente y de un zarpazo debates de actualidad como el de la eutanasia, el aborto, o el cambio climático, o el paro: Se le dice a la gente que deje de preocuparse y que viva la vida y tema resuelto.

El otro día tuve una conversación con un amigo mío porque yo dije que el hombre procede del mono y él decía que no, que eso no podía ser porque los monos son más tontos y más peludos y de otra naturaleza que el hombre y bueno que al final no logramos llegar a una conclusión fundamentada. Pues ahora mismo voy a ir y le voy a decir que deje de preocuparse y que viva la vida. Porque lo dice la Unión de ateos y librepensadores y ya está.
Estoy totalmente seguro de que me va a decir que el que lleva la razón soy yo.
O quizá me mande a tomar por el culo.
Luego vengo y os lo cuento.