jueves, 11 de noviembre de 2010

Sahara libre

Toda la vida diciendo o simulando que Marruecos no tiene la “soberanía” sobre el Sahara y ahora va y se le escapa esa palabra a nuestro nuevo Jáuregui. Supongo que habrá que perdonarle porque todavía está muy crudito el hombre. Estos eran los que se iban a explicar mejor que nunca. Ya lo creo que se han explicado. Con estas declaraciones ha dejado entrever que no se va a hacer nada en el conflicto de El Aaiún.

Nos preocupa todo el mundo y lo que tenemos aquí al lado nos da igual. Gaza; recuerdo cuando todos nos estremecíamos con lo que Israel estaba haciendo con mucho mejor armamento y ahora con el Sahara…

Y la Trini por ahí, en Bolivia, dicen.

España tiene que mediar en este conflicto, tiene que decirle a Marruecos que no puede hacer una limpieza étnica. No se puede apropiar de la vida de los saharauis para hacer con ellos lo que le venga en antojo.

Decía ayer Carmen Rigalt: “que fácil es gritar Tíbet libre cuando ni se sabe dónde cae Tíbet”. ¡Lleva toda la razón! Nos unimos a las causas más lejanas para que en el mundo no se violen los derechos humanos y a las que tenemos aquí, a la vuelta de la esquina, a las que nos tenemos que unir por propia vergüenza histórica, por propia humanidad para con nuestra antigua colonia, las dejamos caer al fondo del pozo sin tan siquiera tirarle una soga.

Marruecos nos da miedo, nos da muchísimo miedo. Pero nos da miedo desde hace unos años, ¿o es que no nos acordamos ya de la Isla de Perejil? Sí, que es una piedra inhabitada, pero no se le temió a defenderla.

La soberanía. La puta soberanía de Marruecos. Pues tiene Corpus Nudum que decirle algo al señor Jáuregui: ¡La soberanía de Marruecos sobre el Sahara no existe más que en la boca de Jáuregui y en la de Marruecos!

Queridos amigos, que ganas tengo, que ganas tengo; de que a algún político de Marruecos se le escape algún día y diga que España tiene soberanía en algo. En lo que sea, pero en algo.